Unidos por la presencia de Cristo.

“Recuerdo una frase que en la película de Lutero, ponen en su boca, “puede haber salvación fuera de la Iglesia, pero jamás sin Cristo”

Aunque hoy sepamos que la Iglesia se extiende más allá de una estructura visible, lo cierto es que el Salvador es Jesús, y que si lo reconocemos como Redentor, como Maestro, como Hijo de Dios, ya estamos unidos en Él, y Él es al fin y al cabo quien importa.

Un solo Señor, una sola fe, un solo bautismo (Ef 4,5-6)

El bautismo ya lo tenemos, uno sólo, la Fe cada vez nos enteramos de que no era tanto lo que nos separaba, a veces cuestión de matices, como ejemplo la doctrina de la justificación, Un solo Señor, no hay otro Jesús

Un Dios Padre que actúa en todos, y, si es en todos, también es, en aquellos con los que como católicos aún no estamos en plena comunión

Que esta en todos, por lo tanto, también esta en ellos

Y que esta sobre todos, por lo tanto, también esta por encima de nuestras costumbres, tradiciones, que no podrán o no deberán ser puestas en un “altar” y si es preciso deberán ser sacrificada, si lo exige el logro de la Unidad, porque esta es voluntad divina, deseo del Hijo de Dios.

Ez 37,15-28: Mi morada estará junto a ellos

Para mí esto significa, que Jesús nos hizo un solo Pueblo, su Pueblo, su Iglesia en el madero de La Cruz, anoto nuestros nombres en los 2 maderos de la Cruz, y nos unió a si, nos hizo su Cuerpo, que es la Iglesia, nos perdono, y nos ofreció la salvación

Sal 67 (66): Oh Dios, que todos los pueblos te den gracias

Jn 14,23-27: Vendremos a él y haremos morada en él.

Jesús dice que si uno cumple la Voluntad de su Padre, Él y el Padre vendrán a esa persona, y, vivirán en ella, por lo tanto, la Trinidad mora en cualquiera que busque la voluntad de Dios, por eso. ¿Con que derecho, puedo yo despreciar, o insultar a un hermano, porque no esté en plena comunión visible con la Iglesia, si por la inhabitación Trinitaria, él mismo es Iglesia, y, él mismo esta unido a la Iglesia que transciende tiempo, y, espacio, hacerlo me parece sería suponer, que esa persona no cumple la voluntad de Dios, y eso, lo tenemos prohibido, no podemos juzgar.

Pero esto me dice también otra cosa, me dice, que dado que la Unidad tiene que ser obra de la Trinidad; habrá que dejar, y hacer que Ésta actúe dentro de nosotros, y como sólo esta en quien hace la Voluntad del Padre, quiere decir que el verdadero ecumenismo me exige buscar y vivir su voluntad en todos los campos, que no se puede ser “ecumenista” al margen de Dios.

Día segundo

Edificar la unidad de los cristianos con Jesús entre nosotros. Ecumenismo diario

Podría ser el saber aceptar también a aquellos que no entendemos en nuestra Iglesia

Escojo la lectura de Pablo

1 Cor 12,12-31: Dios dispuso según su voluntad a cada miembro en el cuerpo

sí todo el cuerpo fuera ojos, tendríamos un monstruo, en la Iglesia debe ser igual, no podemos todos ser lo mismo, aunque a veces lo hayamos querido, debe haber Unidad en la diversidad, y por encima de todo el Amor.

Si a mi me duele un brazo, no es mi brazo el que dice “ yo brazo duelo”; ni a mí se me ocurre decir, “ yo estoy bien, el que tiene dolor es mi brazo”; no, lo que yo digo, es “ me duele un brazo, me duele a mi, persona, y para curar el dolor, pues a lo mejor, hago sufrir un poquito al estomago, tomando una aspirina, es decir los miembros sanos, se “ sacrifican” por el miembro enfermo.

La desunión de los hijos de Dios, de los cristianos es una Enfermedad, es un mal que afecta al Cuerpo de Cristo, y quien sufre por esa “ Enfermedad” es Jesús, es Él quien dice “ me duele ver mis miembros desmembrados; y del mismo modo que en el ejemplo del cuerpo físico, aquí también nos toca sufrir, para restaurar la Unidad”, él como, ya Dios lo indicará

Día tercero

Orar juntos en el nombre de Jesús

Y su oración fue, que fuésemos Uno, como el y su Padre, son Uno, el Uno.

Mt 18,18-20:

Y como Jesús, lo puede todo con su Padre, si pedimos la Unidad juntos, la logramos

Día cuarto

Del pasado al futuro: perdón y purificación de la memoria

Me alegro mucho cuando el Papa pidió perdón por las burradas de los hijos de la Iglesia católica, pero me parece que no debemos ser los únicos en pedir perdón, la historia demuestra que todos, toditos tenemos ropa que lavar, y no se trata de echar nada en cara, pero si sería un gesto noble por parte de otros cristianos

Pero tampoco podemos quedarnos, en el pasado, hemos de mirar al presente, en todos los sentidos

Jn 8,1-11: Tampoco yo te condeno

En un principio no le veía sentido, a este Evangelio, qué tendría que ver la adultera aquí, pero de pronto, le he visto su significado

Como aquellos judíos los cristianos hemos llevado a otros cristianos ante la presencia de Jesús, y le hemos exigido, que los condene, unos habrán aducido, que eran unos papistas, despreciadores de Las Escrituras, otros hemos llevado a esos mismos cristianos, y los hemos acusado de herejes, de cismáticos,

Jesús ha obrado como en él caso, de la adultera

Nos mira y nos pregunta, Lutero, Calvino, Zwinglio, rompieron mi túnica, ¿ y tú, y vosotros no tenéis ninguna responsabilidad, que hacéis por lograr la unión de mi Cuerpo, que es la Iglesia, qué hacéis por buscar y vivir la Unidad, o por el contrario, a veces no creáis desunión dentro de vuestras mismas comunidades.

Pero no, nos condena, nos despide con un cariñoso, “ no peques más”

Es decir si antes odiabas al hermano, ahora ámalo

Sí antes creabas desunión ahora crea “ unión”

Día quinto

La presencia de Dios entre nosotros una llamada a la Paz

Salmo 46

El Señor esta con nosotros

Hace poco, hablaba casi por casualidad a un chico de que Marili y yo, formábamos parte de un grupo de ecumenismo, su respuestas fue “ esta bien eso, de reunirse todos los comunistas”

Y no es la primera persona que dice semejante “ burrada”

Otros aún son peor, salen con la idiotez de que, “ ellos son católicos, que creen los que les enseño su abuela”

No faltan los que dicen, ¿ para qué vale, lo que hacemos?

Incluso a veces se ve desinterés por parte de quienes debieran estar más comprometidos. Tendrán razón

No, y aunque parezca imposible la Unidad se logrará, porque Dios el Señor esta con nosotros, y es el Primer interesado, cómo, como Él quiera, Cuándo, cuando él quiera.

Día sexto

Ser misioneros en el nombre de Jesús

Lc 10,1-12: Jesús envía a sus discípulos.

Y manda de 2 en dos, pero no podemos convencer a nadie, si llegamos peleándonos, si un vendedor de aspiradores a domicilio, viene con otro, y uno dice que vale para secar agua y el compañero que ni se me ocurra acercarla al agua, pues evidentemente no voy a comprar la aspiradora

Si los cristianos en vez de presentarnos como hermanos unidos, lo hacemos como enemigos el mundo no podrá conocer a Jesús, y la culpa será nuestra.

Día séptimo

Reconocer la presencia de Dios en el otro: aceptar al otro en nombre de Jesús

Act 9,1-6: Yo soy Jesús, a quien tú persigues;

Actualizando, “ Yo soy Jesús, al que tú, llamas hereje, al que tú llamas cismático, al que tú llamas papista”

Día octavo

Unidos en la esperanza

Ap 21,1-6: Dios estará con ellos;

En la Tierra nueva, no hay mar que separe a los hombres, es decir han desaparecido las causas que nos separaban, los hermanos que forman parte de la Iglesia Triunfante, están unidos independientemente de la Iglesia de la que formaran parte en la tierra, allí, todos son miembros de la Única Iglesia, la Triunfante, en el Cielo no hay católicos, bautistas, ortodoxos... en el Cielo hay sólo Santos, sólo hijos de Dios en plenitud, hijos, en el Hijo, “ el mar ha desaparecido”

“el Dios con ellos” será su Dios, es decir el Enmanuel, o sea Jesús, lo que nos une ya a los cristianos es que todos reconocemos a Jesús como nuestro Dios

Y Dios añade que hacen nuevas todas las cosas, por lo tanto, lo viejo, lo roto, la desunión que hemos puesto nosotros, Dios la hace desaparecer-

He encontrado, en mi ordenador, estas “auto meditaciones” hechas con motivo de la Semana de oración por La Unidad, de uno de éstos últimos años, y, me ha parecido, bien, compartirlas con vosotros

Un abrazo

Maite

“Los ricos empobrecen y pasan hambre, los que buscan al Señor no carecen de nada”

Muchas gracias, Maite, están muy buenas.

Justamente para el curso sobre el Ev. de Juan que estoy dando por skype, estuve preparando estos días muy a fondo el cap. 17, la "oración sacerdotal" de Jesús. Eso me permitió centrarme estos días en meditar mucho más de lo habitual en la trascendencia que tiene para Jesús la cuestión de la unidad.

En ese momento tan íntimo de diálogo con el Padre, a punto de consumar su entrega y de conseguir por fin la reconciliación de Dios con el hombre, podría haber pedido infinidad de cosas, y meditado en muchísimos temas de gran importancia... pero lo que pide es que los suyos sean uno.

Y no sólo los suyos que estaban allí con él, sino que lo vuelve a pedir cuando evoca a los creyentes futuros, a los que creerán por la predicación apostólica, ¡nosotros!

No cualquier unidad, sino la unidad de la vida trinitaria, en la que en la misma y única naturaleza divina, coexisten tres Personas, que son un solo Dios verdadero.

Cuando queremos fabricar la unidad nosotros, nos sale una uniformidad ñoña, todos sonriendo a la luna, y hablando lo menos posible para que no afloren las diferencias, nos damos palmaditas en la espalda y nos mandamos bendiciones, que mayormente no salen del corazón.

Cuando nos dejamos llevar por nuestras naturales diferencias, llegamos al borde de la ruptura, alguna que otra vez por cosas serias, pero las más de las veces por auténticas tonterías.

La unidad verdadera, la que pide Jesús, imita la vida interior de la Trinidad, y sólo puede ser un don de ella, algo donado por ella a quienes se lo piden, así que lo único que podemos hacer de positivo para alcanzar la unidad o mantener la que tenemos es pedirla insistentemente.

Ahora bien, también podemos hacer cosas para evitar que se pierda la unidad que tenemos, o mejor dicho, podemos no hacer determinadas cosas que llevan tarde o temprano a la pérdida de la unidad eclesial; un hacer negativo, un dejar de hacer.

Por ejemplo:

-dejar de sentirse adalid de la Verdad Católica: la asistencia a la verdad de la fe está asegurada por el propio Jesús. No es que no hay que hacer nada por custodiarla, pero lo que se haga tiene que ser en un clima de la menor crispación posible, persuadiendo, no pretendiendo imponer, discutiendo "en discusiones amables". Esos católicos que se la pasan protestando por la fe de los demás y temerosos de que la Verdad se vaya al garete, hacen mucho daño al tejido de la unidad cristiana, son incluso posiblemente responsables de rupturas que no se darían sin ellos.

-dejar de sentirse adalides del "diálogo con el mundo": algunos católicos quieren apurar el diálogo con el entorno, con la cultura, como si la vida de ellos mismos careciera de sentido si no ven que el mundo moderno se convierte, para lo que las más de las veces lo que hacen es diluir la fe para que resulte cómoda y rápidamente asimilable. Desde luego que no hay realidad que exista y no contenga verdad, eso es un principio metafísico que hasta los paganos conocieron, así que podemos estar tranquilos que nuestro mundo está lleno de verdad, pero por eso mismo, no hace falta apurarse para unirse a él: también está lleno de tiniebla, y es Jesús -nuestra oración, nuestra intercesión, nuestro testimonio- quien puede disiparla, no nosotros.

Busqué dos ejemplos contrarios (de esos que cada uno acusa al otro de ser más malo y fiero), pero hay muchos más atentados a la unidad. Incluso cuando construimos unidad a nuestra manera, atentamos contra la Unidad por la que pidió Jesús.

Lo fundamental es darse cuenta, tomar cada vez más conciencia de que la unidad no es un accesorio de la fe, sino su verdadera esencia, así que cualquier cosa debe ser preferida antes que romper la unidad de la Iglesia, cuando ella resulta ser espejo de la Trinidad.

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«Busca a Dios, entonces hallarás a Dios y todo lo bueno.» (M. Eckhard)

El sacerdote, que lleva nuestro grupo de ecumenismo, siempre nos recuerda, que La Unidad, ya esta dada por Dios, es un Don suyo, a su Iglesia, y, que por eso, buscamos, la Unidad de los cristianos; y, de esa Unidad, sólo es modelo La Trinidad, y, por lo tanto, nos la dará, cuando quiera, y, como quiera

Y, como bien apuntas tú, los que se empeñan en defender la fe, mejor dicho, “ su fe”, a capa y, espada, muchas veces con argumentos, de otros, que se han aprendido de memoria, que no saben, rebatir, ni debatir un punto contrario, y, sólo terminan con el insulto, metiendo de todo en el lote, dogma, no dogma, olvidando que los dogmas se definieron con el lenguaje de una época, y, que sin dejar de ser verdad, hoy, pueden decirse con el lenguaje de la nuestra, pero digo no sólo dogmas, verdades de fe, leyendas, revelaciones privadas, sin una base ni bíblica, ni eclesial, ni teológica, creyéndose, dueños de la verdad, salvadores del mundo, Jesús, no debía de saberlo, se hubiera ahorrado la Cruz, esos no convencen a nadie, incluso, cuando creen tener éxito, uno cede, por no acabar con dolor de cabeza, o, un brazo roto, y, sí son causa muchas veces de ruptura, estoy segura, que muchos que acaban no en Iglesias cristianas, o, Comunidades, si no en sectas como Los TJ, lo son, porque ante una duda, sobre un dogma, o, cualquiera de las cosas citadas, la persona, a la que pregunto, en vez de oírla, dejarla que se explicara, y, tratar de explicarle, lo que pregunta, le suelte lo que dice el catecismo, al pie de la letra, o, la definición de un Concilio, seguido de un, “aquí lo tienes, lo tomas, o, lo dejas, si lo dejas, eres un hereje”; si esa persona tiene, la mala suerte de toparse con una persona de una secta, que le da la razón, pues ya esta uno fuera

En lo del dialogo con el mundo pasa igual, La Fe no se puede aguar, el mundo no se va convertir, porque rebajemos las exigencias de la Fe, se va convertir, si somos levadura en la masa

Un abrazo

Maite

“Dijo Josue, a Moisés, mi señor, están profetizando, hazlos callar, Moisés respondió, quiera Dios, que no sólo ellos, si no todos profetizaran”

Como el modelo de la unidad es la TRinidad, jamás podremos confundir unidad con uniformidad.

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«Busca a Dios, entonces hallarás a Dios y todo lo bueno.» (M. Eckhard)

Asi es,. pero lo confundimos, o, peor aún, queremos que los demás sean como nosotros, ojo, a los otros l4es pasa 3/4 de lo mismo

Un abrazo

Maite

"Fueron y encontraron al niño en un pesebre"