ALENCIA, lunes, 30 mayo 2005 (ZENIT.org).- El arzobispo de Valencia, monseñor Agustín García-Gasco, reveló este domingo que Benedicto XVI quiere participar en el Encuentro Mundial de la Familia que se celebrará del 4 al 9 de julio de 2006 en esa archidiócesis.
Tras leer un mensaje del Papa al término de la misa del Corpus Christi que presidió el prelado en la catedral (Cf. Zenit, 29 de mayo de 2005), aclaró: «aunque todavía no se ha hecho pública la presencia del Papa porque, como es lógico, la Santa Sede no lo comunica oficialmente hasta unos meses antes, lo cierto es que la carta expresa su voluntad de poder acudir a Valencia y es todo un estímulo para continuar los preparativos que venimos desarrollando», informa la agencia archiciocesana AVAN.
El cardenal colombiano Alfonso López Trujillo, presidente del Consejo Pontificio para la Familia, se desplazará en los próximos días a Valencia para decidir los escenarios de los principales actos y establecer el programa del evento.
Para la misa final que presidirá el Papa y con la que culminará el Encuentro, el cardenal examinará un total de cuatro propuestas de lugares, planteados por la Fundación Encuentro Mundial de la Familia, que integran el Arzobispado, la Generalitat Valenciana (el gobierno autonómico), el Ayuntamiento y la Diputación de Valencia.
A los tres lugares que ya se han proyectado hasta ahora, circuito Ricardo Tormo de Cheste, playa de la Malvarrosa, y avenida de las Cortes Valencianas, se ha incorporado una cuarta propuesta, la plaza Europa, popularmente conocida como del «Parotet», por la escultura ubicada en ella, donde confluyen varias avenidas con grandes espacios abiertos, según han indicado a la agencia AVAN fuentes de la Fundación.
Todo Encuentro Mundial de la Familia consta de cinco manifestaciones principales: un congreso internacional teológico-pastoral, un congreso de los hijos, celebraciones eucarísticas para las familias en peregrinación, un encuentro-fiesta con testimonios de familias y la misa conclusiva presidida por el Papa o su legado y que es concelebrada por cardenales, obispos y sacerdotes de todo el mundo.
Los anteriores Encuentros Mundiales de la Familia, que se convocan cada tres años, se han celebrado hasta ahora en dos ocasiones en Roma, en 1994 y 2000, otra en Río de Janeiro, en 1997, y, en 2003, en Manila. Todos ellos han estado presididos por el Santo Padre a excepción del de Manila, y han contado con la participación, cada uno de ellos, de más de un millón de personas.