IJAS, viernes, 15 diciembre 2006 (ZENIT.org).- Los profesores de Religión y alumnos del Instituto «Las Lagunas» de Mijas (Málaga) y el colectivo de padres católicos de Málaga han expresado su indignación por la que consideran una «actitud irrespetuosa» por parte de la directora del Instituto, Mercedes García del Álamo, al tirar a la basura un Belén montado por los alumnos de Religión de 1º ESO.
La medida se tomó con «el argumento de que en una escuela pública de un país laico no están permitidos los símbolos religiosos», explica la Asociación Profesional de Profesores de Religión en Centros Estatales de
Andalucía (APPRECE-Andalucía).
Juan Luis Yudego, profesor titular de Religión del Centro, explicó a la agencia Veritas que los hecho ocurrieron el pasado 30 de noviembre, cuando una profesora de Religión en el Instituto decidió realizar un Belén con los alumnos.
Se trata, aclara, de «una actividad programada por el equipo de profesores de Religión del Centro como procedimiento educativo, cuyo objetivo es que el alumnado comprenda y valore los distintos elementos culturales y religiosos que forman parte de las tradicionales fiestas de la Navidad que se celebran en nuestra sociedad».
«La profesora de Religión, al entrar en el aula al día siguiente, no encontró el Belén en su lugar y buscándolo por otras dependencias del Centro lo encontró metido en unas bolsas de basura, donde la directora lo había depositado, pudiendo observar el deterioro que habían sufrido algunas piezas», relató el profesor titular de Religión.
Yudego aseguró haberse reunido inmediatamente con la directora con la única respuesta de que se trata de una «escuela pública de un país laico y no están permitidos los símbolos religiosos» y que «este tipo de actividades no pueden tolerarse en un centro público donde conviven alumnos de diferentes religiones que podrían sentirse ofendidos».
Yudego mantiene que se trata de una actividad cultural y artística donde todos los alumnos han escogido la asignatura de Religión y solicita a la directora que sea «tolerante y respetuosa».
Ambos profesores de Religión han manifestado «sentirse humillados en su dignidad profesional» y Yudego confiesa estar pasando varias noches sin dormir por lo sucedido.
La agencia Veritas ha intentado ponerse en contacto con la directora del centro, Mercedes García del Álamo, para escuchar su valoración al respecto, pero no ha querido hacer manifestaciones, declinando la invitación a exponer su versión de los hechos.
Las primeras reacciones no se han hecho esperar y los padres de alumnos afectados han comenzado a enviar cartas de apoyo a los profesores de Religión afectados e incluso los alumnos se encuentran recogiendo firmas donde expresan su malestar y piden a la Dirección que reponga el Belén de su propiedad.
El vicepresidente de APPRECE-Andalucía, Santiago Vela, explicó que se han puesto al servicio de los profesores y de los padres los servicios jurídicos de la Asociación para que realicen las acciones que estimen oportunas y muestra su deseo a que «el Belén sea restituido», confiando en que «no haga falta llegar al extremo de acudir a los tribunales».
Para Vela, «actuaciones como las de este equipo directivo nos traen a la memoria la de los talibanes que destruyeron las imágenes de los Budas esculpidas en el desierto de Afganistán» y son un «flaco favor a la imagen de la escuela pública, la escuela de todos, con esta actuación de intolerancia y nefasto ejemplo para los niños y jóvenes que deben educarse en ella».
Asimismo, Eduardo Caro, presidente de la Federación de CONCAPA (Confederación Católica de Padres de Alumnos) en Málaga, expresó su malestar por lo acontecido, en lo que considera «una actitud irrespetuosa» y anunció que «llevarían el caso a los tribunales si fuera preciso» e incluso pedirán la dimisión del delegado provincial de la Consejería de Educación en Málaga, José Nieto Martínez.