CIUDAD DEL VATICANO, viernes, 21 diciembre 2007 (ZENIT.org).- Una capilla ecuménica en la basílica papal de San Pablo Extramuros es la primera gran novedad del Año Paulino, a celebrarse del 28 de junio de 2008 al 29 de junio de 2009.
Estará en lo que hasta ahora ha sido baptisterio de planta griega y es un hecho de gran alcance para el diálogo entre los cristianos.
Lo anuncia, en una entrevista a «L'Osservatore Romano», el cardenal Andrea Cordero Lanza di Montezemolo, arcipreste de basílica construida sobre la tumba del Apóstol de las Gentes.
El cardenal Montezemolo acaba de presentar el programa del Año Paulino a Benedicto XVI, que le recibió en audiencia el pasado 17 de diciembre.
La capilla ecuménica, explica el purpurado italiano, se realizará en el citado baptisterio que antes era una capilla de planta de cruz griega, y que fue reformada por el arquitecto Arnaldo Foschini entre 1928 y1930.
De este modo, añade, se dará «la posibilidad a comunidades cristianas no católicas de venir a rezar a la basílica y a celebrar la liturgia».
«El altar, reformado, será el que encontramos y sacamos de allí durante las recientes obras junto a la tumba de Pablo, que han hecho visible la misma a los peregrinos», explica.
Los dos objetivos fundamentales del Año Paulino son ahondar el conocimiento de san Pablo y promover el camino ecuménico y el lugar preferente de celebración en Roma será esta basílica custodiada por monjes benedictinos.
«Para dar un impulso ecuménico, los monjes han decidido, en las vísperas de cada viernes, invitar a una comunidad cristiana no católica para rezar juntos», concluye el purpurado.