OMA, jueves, 23 diciembre 2004 (ZENIT.org).- Después de una primera edición agotada en pocos días en las librerías de los Estados Unidos, se acaba de distribuir la segunda tirada del libro «The Pius War ? responses to the critics of Pius XII» («La guerra de Pío ? respuestas a las críticas de Pío XII», Lexington Book, Lanham, Maryland, 282 páginas, 29,95 $).
Editado por Joseph Bottum, director de la sección «Books and Arts» del «The Weekly Standard» y por David G. Dalin, rabino, profesor de Historia y Ciencias Políticas en la Ave Maria University, el volumen recoge once artículos de filósofos, teólogos, periodistas, abogados, historiadores, y especialistas de la Shoah, que responden detalladamente a las acusaciones dirigidas contra Pío XII, papa de 1939 a 1958.
En la segunda parte, William Doino recoge en 191 páginas una bibliografía actualizada con todos los libros y artículos relevantes publicados sobre las relaciones entre la Santa Sede y el régimen nazi, así como sobre la persecución de los judíos.
En declaraciones a Zenit, Doino ha explicado que en la biografía ha introducido también una crónica detallada de lo que hizo la Iglesia católica para salvar a los judíos de la persecución nazi en los diferentes países.
A los que acusan al Papa Eugenio Pacelli de haberse quedado en silencio ante los crímenes antisemitas del nazismo, Doino aclara: «Pío XII no se quedó en silencio».
«Cuando era nuncio en Alemania (1917-1929) y secretario de Estado (1930-1939) y sobre todo cuando era pontífice, Pacelli denuncio de manera clara y fuerte los males de su tiempo, es decir, el racismo, los odios raciales y étnicos, el nacionalismo exasperado, los crímenes de guerra y las atrocidades contra las poblaciones civiles», aclara.
Otros críticos admiten que Pío XII no se quedó en silencio, pero aseguran que sus declaraciones fueron genéricas y sin impacto. Afirman que no tuvo el valor para pronunciar la palabra «judío».
«Esto es falso --subraya Doino --. En su primera encíclica "Summi Pontificatus", publicada poco antes del estallido de la segunda guerra mundial, Pío XII no sólo mencionó la palabra "judío", sino que además lo hizo en un contexto de defensa de la familia humana. Citando a san Pablo, Pío XII escribió: " no hay griego y judío; circuncisión e incircuncisión; bárbaro, escita, esclavo, libre, sino que Cristo es todo y en todos" ( Summi Pontificatus, n.36)».
En el libro, Doino cita los artículos de «L?Osservatore Romano» y las transmisiones de «Radio Vaticano» en los que se defendieron explícitamente a los judíos, mencionándolos con su nombre, antes, durante y después de la guerra.
Además, en marzo de 1940, durante un encuentro privado con Joachim von Ribbentrop, ministro de Asuntos Exteriores alemán, Pío XII condenó la persecución nazi de los católicos y de los judíos de manera fuerte y decidida.
Doino propone leer también lo que escribían sobre el Papa Pacelli los periódicos nazis. «Es evidente que para los exponentes del régimen nacionalsocialista las palabras de Pío XII eran sumamente claras, de hecho le acusaban de ser "el portavoz de los judíos"».
Respondiendo a la tesis de Susan Zuccotti, según la cual los católicos ayudaron a los judíos, pero Pío XII no sabía nada y no tenía nada que ver con la obra de asistencia, Doino explica a Zenit que se trata de «una tesis absurda», y de hecho «The Pius War» documenta ampliamente la ayuda directa coordinara por Pío XII a favor de los perseguidos el nazismo en toda Europa.
«Entrevisté personalmente a monseñor John Patrick Carroll-Abbing --concluye Doino--, miembro de la red antinazi en Roma, quien me dijo que recibía órdenes directamente de Pío XII para esconder y proteger a los judíos».