Algunos explican la insólita amplitud de la genealogía por el hecho de que el padre es Kusí (2), que significa kusita, etiope, por tanto el versículo tiene por función aclarar que a pesar de ese nombre, su genealogía es radicalmente judía (BJes, introd.). La forma de nombres propios terminadas en i pueden ser también gentilicios, de allí la posible confusión.
Es posible también que el redactor pensara (no necesariamente con razón) que el Ezequías (5) presente entre los antepasados había sido el rey homónimo, y la llevó hasta allí (ver Johnson, Purpose, pág.3)