Eusebio recoge la tradición de que fue el primer obispo de Atenas.
Su nombre está ligado a una leyenda teológica, ya que hacia el siglo V o VI, desde Siria o Egipto comenzaron a circular unos escritos místicos a su nombre, en especial la obra llamada "De los nombres divinos", que ejerció grandísima influencia en la teología medieval, sobre todo por el prestigio de venir de era apostólica, y del entorno paulino. Casi desde el principio hubo la sospecha de que el autor era ficticio, pero la obra siguió (y sigue) utilizándose con el nombre de autor de "Pseudo Dionisio Areopagita".