Nacido en el 27 d.C., recibió de Roma varios territorios, primero fue rey de Calcis, luego de Iturea y Traconítide, y Nerón le añadió algunas partes de Galilea y de Perea. Aunque no gbernaba sobre Judea, Claudio le había dado el privilegio de nombrar y destituir a los sumos sacerdotes, lo que ejerció hasta el 66, en el inicio de las guerras judías. No tenía, desde luego, jurisdicción sobre Pablo, sino que lo escucha, como amigo y cuñado de Félix e interesado en las cuestiones judías.