Se trata posiblemente de la portadora de la carta, por eso es nombrada en primer lugar, y antes de iniciar los saludos propiamente dichos.
Es difícil saber el alcance de la palabra "diaconisa" en este contexto, si se refiere a un ministerio "oficial" (es decir, un ministerio ordenado en la organización de la Iglesia), o si simplemente se está tomando la palabra por su significado llano, es decir: servidora.
En realidad san Pablo dice "diákonos", ya que no existe aun una palabra diferenciada para el femenino, sino que se la distingue por el artículo (el o la) que no está en este texto. La palabra "diaconisa" surgirá recién en el siglo III
En el medioevo el nombre de "diaconisa" pasó a designar a las casadas o viudas que se consagraban religiosamente, por tanto a una tarea carismática, no ministerial (por ej. Santa Radegunda, Santa Olimpia, y otras), a veces se utilizaba también para vírgenes, como Santa Martina.
Sobre el ministerio de las diaconisas, ver el estudio de la Comisión Teológica Internacional (2022), cap. II, núm. 4.