Si hay un símbolo potente en el Apocalipsis es el de esta Mujer (una de las cuatro que aparecen en todo el texto, y la primera de las dos imágenes positivas). En principio pareciera representar a la Iglesia de las persecusiones, aunque muy pronto, ya entre los Padres y a través de la identificación con la nueva Eva según Gn 3,15, comenzó a verse en ella a la Virgen María, de tal modo que sus atributos son hoy los que utilizamos para representar la Inmaculada Concepción.