Depende del carácter que tengan esos encuentros. Si se trata de reuniones para rezar juntos en lo que podemos compartir: la creencia en Dios, en la acción del Espíritu, la salvación recibida por Cristo, etc. (aunque no entendamos esas cuestiones de idéntica manera) no sólo no hay ningún problema, sino que es algo bueno.
La cuestión es que no sean reuniones camufladas para "comerle la cabeza" un grupo al otro. La intención de base no puede ser tratar de convertir uno al otro (ojo, ni los demás al católico, ni viceversa), ni criticar los puntos débiles de la religión de los demás, sino orar juntos y que Dios se manifieste en la vida de cada uno. Si alguno debe cambiar de fe, ya se lo hará saber Dios a su manera, nada de "lavados de cerebro".
Eso es lo habitual en los encuentros interconfesionales e interreligiosos. Me suena raro, y no puedo ser más preciso porque la pregunta no da muchos datos, una reunión interreligiosa donde participen Testigos de Jehová... no conozco que tengan un espíritu lo que se dice "ecuménico", pero todo puede ser...
En fin, ande con cuidado, oración sí, eso es bueno, y muy necesario, pero adoctrinamiento... dese media vuelta y vaya a su casa a rezar un Padrenuestro, que va a aprovecharlo mejor.