El "Ordinario de la Liturgia de las Horas" explica el modo correcto de unir las distintas horas con la misa, y de unir el Oficio de Lecturas a cualquier otra hora (ya que es la única que propiamente se puede unir a las demás).
El tema lo trata en su nº 99, y dice:
Si se celebra el Oficio de lectura inmediatamente antes de otra Hora del Oficio, se puede adelantar al comienzo de toda la celebración el himno correspondiente de esta Hora; después, al fin del oficio de lecturas, se omite la oración y la conclusión, y en la Hora siguiente se omite la invocación inicial y el Gloria al Padre.
Como puede ver, la unión de las dos horas no supone eliminar prácticamente nada de las dos.
Del modo como lo hacéis habitualmente no parece muy correcto, en realidad las Completas no las estáis rezando. Piense que los salmos son el alma del oficio divino, el núcleo desde donde se desarrolla toda la hora, y si se elimina precisamente el salmo... ¡ya no hay hora!
Por otro lado, en cuanto a tiempo, rezarlo correctamente no supone demasiado más, ya que la salmodia de Completas es sólo un salmo, a lo sumo 2 más breves los domingos después de IVísperas y los miércoles, más la lectura breve, que apenas supone tiempo.
Si queréis ahorrar tiempo pero respetando el carácter de las horas, podéis aprovechar que en el Oficio de Lecturas prácticamente siempre se utiliza un salmo partido en tres (o dos salmos, uno de los cuales está partido en dos); en ese caso vale lo que indica el ordinario en su núm 115:
Cuando a consecuencia de su extensión se puede dividir un salmo en varias partes dentro de una misma Hora, a cada una de las partes se le añade su propia antífona para lograr una mayor variedad, sobre todo en la celebración con canto, y para captar mejor la riqueza de¡ salmo: es lícito, sin embargo, recitar el salmo íntegro sin interrupción, utilizando sólo la primera antífona. (el subrayado es mío)
Al quitar las antífonas y glorias intermedios, el salmo recobra su unidad poética y se recita, a mi entender, mejor.
Aunque el documento no lo dice explícitamente, creo que es correcto deducir que el pequeño examen de conciencia antes de Completas conviene hacerlo al inicio de todo, para evitar cortar la recitación de las dos horas unidas con un momento tan íntimo de meditación.