Era una pequeña localidad galilea, cuyos vestigios arqueológicos pueden rastrearse desde el s VIII a.C. hasta el VII d.C., aunque sin ninguna relevancia política ni cultural; de hecho, resulta una exageración (que puede ser estilística o de simple desconocimiento) por parte de san Mateo y san Lucas llamarla "ciudad" (polis) en Mt 2,23 y Lc 1,26, respectivamente. San Jerónimo, traduciendo el Onomastikón de Eusebio de Cesarea (que era de la región) la caracteriza como "viculus", no más que un villorio. No es mencionada nunca en el AT, y aparece apenas un par de veces en documentos extrabíblicos posteriores al NT.
En el NT el nombre se escribe mayormente con tau o con theta final (Nazaret o Nazareth, Mt 2,23; Mt 21,11; Mc 1,9; Lc 1,26; Lc 2,4; Lc 2,39; Lc 2,51; Jn 1,45.46; Hch 10,38), pero dos veces (Mt 4,13 y Lc 4,16, que es un pasaje Q) se escribe "Názara".
Independientemente de los motivos por los que la familia de Jesús estuviera allí, si era por residencia permanente (Lucas) o por un traslado estratégico para no volver a Belén (Mateo), la ubicación era buena para un trabajador manual, ya que estaba a solo 5km de Séforis, que en ese momento requería mucha mano de obra por la reconstrucción que estaba llevando a cabo Herodes Antipas.
Parece indudable que Jesús vivió su infancia y juventud allí, lo que no es tan claro es si el apelativo "nazoreo" (Mt 2,23; Mt 26,71; Lc 18,37; Jn 18,5; Jn 18,7; Jn 19,19; Hch 2,22; Hch 3,6; Hch 4,10; Hch 6,14; Hch 22,8; Hch 24,5; Hch 26,9) o "nazareno" (Mc 1,24; Mc 10,47; Mc 14,67; Mc 16,6; Lc 4,34; Lc 24,19) es o no un gentilicio, es decir, si indica su procedencia de Nazaret.
Mateo así lo entendió en Mt 2,23, pero dada la dificultad para encontrar esta cita en el AT (en el que no se halla literalmente), junto a que no es sencillo trazar filológicamente cómo se pasa del nombre del pueblo "Nazaret" al gentilicio, "nazoreo" o "nazareno" (cuando lo lógico sería "nazareteno") podría ser que el adjetivo hiciera alusión a su consagración como "nazir" (si bien Jesús no parece comportarse como un nazir, que le cabe más a Juan El bautista), o aludiera a ser el "vástago" (néser) de David. Se han dado también otras explicaciones menos probables. Es una cuestión abierta, puede verse con amplio detalle en Brown. Luz y otros.